jueves, 18 de noviembre de 2010

Las horas no dicen nada

Ausente de alegría, ausente de risas, ausente de llanto, las lágrimas no salen, las ideas me ahogan en un mar envuelto por malos pensamientos, pensamientos que rugen y piden una respuesta, pensamientos que no se apagan con el sueño más voraz.
Qué pasa, qué me está pasando, que lo único que veo es un futuro donde estoy sola, sin ánimo, sin anhelo, sin nada, es incierto, el tiempo va lento, las horas no dicen nada.
Llévame luz de otoño que atraviesa las cortinas de su habitación, sácame el alma y cuélgala de un hilo, que tal vez así no sienta nada, arrójame al vacío, que vacía quedaré por su respuesta, encapsula los momentos encantadores, que estarán en el recuerdo, su existencia la tendré en los ojos, en las manos, en el espíritu, en mi fe, su recuerdo quedará en mi silencio, porque todo fue un sueño, un sueño del cual tendré que despertar, veo el reloj y las horas no dicen nada, veo la Luna y mi alma es quebrantada.
Déjame entrar a sus pesadillas para poder restablecer todo, déjame amarlo para poder envejecer en sus brazos, para poder decirle que lo amo…

1 comentario:

La Diablesa dijo...

profundo...

***
La Diablesa